La compensación de emisiones de CO2 es una forma voluntaria de combatir el cambio climático. Consiste en participar en proyectos ambientalmente sostenibles a través de una aportación económica o una actuación que compense las emisiones realizadas. Evidentemente, el paso previo a la compensación debe ser el cálculo de las emisiones producidas, que en cualquier caso deben ser las mínimas posibles.

Existen numerosas iniciativas tanto públicas como privadas a nivel mundial que se encargan de realizar y certificar estas compensaciones llevando a cabo acciones  concretas: reforestaciones, proyectos de eficiencia energética, gestión de residuos, etc. Algunos de estos proyectos se desarrollan en países no industrializados con la intención de luchar contra el cambio climático al mismo tiempo que contra la pobreza.

Este apartado se irá actualizando periódicamente con proyectos de este tipo o con iniciativas ciudadanas que puedan surgir.