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18 Abr 2022 Climatología, Meteorología, Recursos Naturales y Medio Ambiente

El cambio climático influyó en la lluvia de los huracanes en 2020

Fuente: Agencia SINC

La actividad humana es la propulsora de la actual crisis climática, que aumentó las cantidades de precipitaciones por hora durante la temporada de huracanes del Atlántico hasta un 10 %, en comparación con los niveles preindustriales, según un estudio liderado por tres instituciones norteamericanas.

La temporada de huracanes de 2020 fue una de las más activas desde que se recogen datos, con 30 tormentas con nombre registradas. Los científicos han demostrado que, en ese mismo año, la temperatura media global de la superficie del mar se incrementó en más de 1 °C, en comparación con los niveles preindustriales.

Se ha sugerido que el aumento de la temperatura de la superficie puede haber influido en la intensidad y la concurrencia de las tormentas, pero es difícil desentrañar los diversos efectos climáticos que compiten entre sí en los parámetros de estas borrascas. Lo que sí está claro es que los seres humanos estamos detrás del aumento de gases de efecto invernadero en la atmósfera.

Ahora, una investigación de las universidades Stony Brook, Estatal de Pensilvania y el Laboratorio Nacional Lawrence de Berkeley, todas en EE UU, muestra un modelo del impacto del cambio climático inducido por el hombre en las temperaturas de la superficie del mar. Sus resultados sugieren que durante 2020 las temperaturas de la superficie aumentaron entre 0,4 y 0,9 °C en todo el Atlántico.

“Para calcular esta huella de calentamiento, utilizamos un gran conjunto de modelos, de modo que comparamos las condiciones ambientales simuladas de 2020 con las de más de 1.000 simulaciones de las condiciones de 1850. Este gran conjunto de datos elimina la influencia de la variabilidad interanual y se centra en el calentamiento causado por el aumento de gases de efecto invernadero”, afirma a SINC Kevin Reed, de Stony Brook, que lidera el estudio publicado hoy en Nature Communications.

A continuación, utilizaron una técnica denominada hindcasting para mostrar qué parte de las precipitaciones extremas de toda la temporada de huracanes del Atlántico Norte de ese año podría atribuirse al aumento de la temperatura superficial del mar inducido por el hombre.

“El hindcasting es similar a las previsiones de un servicio meteorológico operativo, con la única diferencia: se trata de una previsión de un evento o periodo de tiempo pasado. Es una herramienta importante ya que nos permite explorar un evento o periodo de forma retrospectiva”, asegura Reed.

Descubrieron que tanto los índices de precipitación extrema de las tormentas —cantidad recogida en 3 horas— como las cantidades de lluvia extrema —acumulada en 3 días— para las tormentas de fuerza tropical aumentaron un 10 y un 5 %, respectivamente, en comparación con las condiciones preindustriales. Los autores también indican que, en el caso de las tormentas con fuerza de huracán, el efecto inducido por el hombre fue del 11 y el 8 %, respectivamente.

Cada vez más precipitaciones extremas con los huracanes

Los científicos indican que sus resultados demuestran una señal antropogénica en las precipitaciones de los huracanes, que tendrá consecuencias directas para las comunidades costeras.

Los índices de precipitación extrema de las tormentas en 3 horas, así como las cantidades de lluvia extrema acumulada en 3 días para las tormentas de fuerza tropical, aumentaron un 10 y un 5 %, respectivamente

“Es de esperar que en las próximas dos temporadas veamos incrementos similares. Asimismo, a medida que el clima continúe calentándose durante la próxima década, se producirán nuevos aumentos de las precipitaciones extremas provocadas por los huracanes”, concluye.
Imagen 1: La temporada de huracanes de 2020 fue una de las más activas desde que se recogen datos, con 30 tormentas con nombre registradas. / Pixabay