La etiqueta energética de la Unión Europea ha ayudado a comerciantes y consumidores en la adquisición de sus electrodomésticos desde hace más de 25 años. Además, ha promovido el desarrollo de productos más innovadores y con un mejor rendimiento. Sin embargo, el aumento de la eficiencia ha obligado a incluir nuevas categorías en la parte más alta de la escala (A+, A++ y A+++), dificultando la identificación de los productos más eficientes, según explican desde Ecodes.

Por ello, la Unión Europea ha revisado y optimizado el sistema según la capacidad actual y futura, simplificando la escala de A a G y haciéndola más entendible y transparente. A través del proyecto Label 2020, que busca armonizar esta transición, comunicamos que el nuevo etiquetado ya se incluye en el embalaje de los electrodomésticos, aunque no entrará en vigor hasta el 1 de marzo de 2021. Inicialmente aplicará a lavadoras, lava-secadoras, frigoríficos, lámparas, pantallas y televisiones. A partir del 1 de septiembre, afectará también a las fuentes de luz.

De acuerdo con Ecodes, varios estudios de percepción en el consumidor demostraron que el etiquetado A+, A++ y A+++ motivaba menos la compra de aparatos eficientes que la escala A-G. Por otro lado, la nueva normativa también modifica el método de cálculo de la eficiencia energética, por lo que no habrá una correspondencia directa entre las etiquetas antiguas y las nuevas.

Como resultado de ese reescalado, los electrodomésticos más eficientes que antes pertenecían a la clase A+++ quedarán asignados a la clase B o C. De esta manera se genera un espacio de mejora a la eficiencia energética de futuras innovaciones. Es decir: la que será la clase A, la más eficiente, quedará desierta inicialmente. En esta misma línea, como las clases más bajas serán eliminadas gradualmente por causa del aumento de los requerimientos mínimos de la UE, la escala se actualizará en consecuencia.

El proyecto Label 2020 ha recibido financiación del programa de investigación e innovación Horizon 2020 de la Unión Europea.

Las claves de la nueva etiqueta
• Habrá una escala común de A a G para todos los productos reescalados.
• Las categorías A+++, A++ y A+ ya no serán usadas.
• El consumo energético de los productos se ubicará de manera más prominente en la sección central de la etiqueta.
• La flecha de energía será complementada con la escala de las clases energéticas disponibles.

Imagen 1: Nuevo etiquetado energético