El primer ministro de Ucrania, Arseni Yatseniuk, ha comunicado hoy que el pasado 28 de noviembre se produjo un accidente en la central nuclear de Zaporiyia, en el sureste de Ucrania, a unos 570 kilómetros de la capital Kiev. El corte de suministro asociado ha empeorado la crisis energética del país, inmerso también en un conflicto bélico con los rebeldes prorrusos separatistas.
El primer ministro ha solicitado al nuevo titular de Energía, Volodimir Demchishin, que aclare las circunstancias de la avería, además de informar cuándo y cómo se resolverá el problema, para restaurar el suministro eléctrico cuanto antes.
Por su parte, Demchishin, ha señalado: «No hay ninguna amenaza. La avería tuvo lugar en el bloque número 3 –un reactor de 1.000 megavatios (MW)– de esta planta atómica, en el sistema de distribución de electricidad. De ninguna manera está relacionado con la generación de electricidad ni con el reactor nuclear».
El ministro de Energía ha subrayado que el accidente no plantea ningún peligro y que esperan que la central vuelva a funcionar con normalidad el próximo viernes, 5 de diciembre.
Desde Viena, la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) ha informado que, de momento, que no va a ofrecer declaraciones sobre el incidente. Según una convención internacional, adoptada tras el accidente de Chernobil –también en Ucrania–, los países deben notificar a este organismo cualquier accidente nuclear que pueda afectar a otros países.
La planta nuclear de Zaporiyia tiene una capacidad neta instalada de 5.700 MW y una capacidad bruta de 6.000 MW. Se encuentra en la ciudad de Enerhodar y cuenta con seis unidades que empezaron a operar a partir de 1984. El propietario es Energoatom, la compañía estatal ucraniana que gestiona sus centrales nucleares.