La moratoria de las centrales nucleares fue una paralización indefinida de las políticas de construcción y puesta en marcha de nuevas centrales nucleares. Esto no significa que se paralizaran las que hay actualmente en funcionamiento, sino la construcción de centrales nuevas. Esta fue la respuesta de algunos gobiernos a cuestiones como la crisis del petróleo de los años 70, la presión de grupos ecologistas y de la comunidad científica, que alertaban de la alta peligrosidad de las mismas y de la gestión complicada de los recursos generados debido a la radioactividad. La moratoria en España acabó en 1997, aunque es necesario la aprobación por parte del consejo de ministros para la construcción de una nueva central.

Fotografía. Fuente: jplenio en Pixabay