Bajo la denominación genérica de biodiésel se incluyen los combustibles constituidos por metil-ésteres de ácidos grasos (conocidos como biocarburantes).

Los ésteres son los compuestos químicos que se obtienen cuando se hace reaccionar un ácido orgánico (fórmula general: R-COOH) con un alcohol. Cuando el alcohol es el metílico (metanol: CH3OH) se obtienen los metilésteres: R-COOH + CH3-OH p R-COO-CH3 + H2O. También se pueden obtener ésteres metílicos tratando una grasa directamente con metanol (en las condiciones apropiadas). Como las grasas están compuestas mayormente por glicéridos (ésteres del glicerol con ácidos grasos), en la reacción de transesterificación se obtiene glicerina además de biodiesel.

Para utilizarlo en motores Diésel, el biodiésel, una vez purificado, se utiliza mezclado con el gasóleo de automoción en proporción inferior al 20 %. Sus principales ventajas estriban en que no produce SO2 y que es una fuente de energía renovable. Sus principales objeciones son que la demanda de biodiésel puede desviar hacia su producción materias primas alimentarias, además no hay actualmente mercado para toda la glicerina que se libera.

Fotografía. Fuente: Berho en Pixabay